El pasado 30 de Noviembre se constituyó en el salón de Plenos del Ayuntamiento el Consejo Municipal de Niños, Niñas y Adolescentes.
Este órgano se forma con la idea de fomentar las relaciones de los niños, niñas y adolescentes con el mundo adulto, con la política municipal y con el compromiso comunitario de la localidad.
Como dice el Reglamento "Con este Consejo ponemos en marcha una iniciativa práctica para el gobierno del municipio, porque los niños y las niñas tienen capacidad para interpretar sus
necesidades, que son las necesidades del mismo pueblo, porque expresan propuestas
claras y sencillas y porque tienen ideas para dar soluciones. El Consejo es también una
forma de garantizar el derecho a la participación a toda una parte de la población en los
espacios, lugares y temas que les afectan."
El consejo está compuesto por:
a) Presidencia: Ejercida por el alcalde o alcaldesa de la localidad que será el Presidente/a del Consejo, o la persona en quien delegue.
- El/la Concejal/a competente en materia de Participación Ciudadana.
- Un/a representante de cada grupo político con representación municipal.
- Los técnicos/as municipales procedentes de las áreas que trabajen
directamente con la Infancia.
- Hasta 20 representantes infantiles vecinos de la localidad, de entre 6 y
16 años de edad en el momento de su elección y procurando una
distribución igualitaria entre los diferentes niveles educativos. Serán
elegidos y elegidas por sorteo entre los candidatos que decidan
presentarse a formar parte del Consejo en los diferentes Centros
educativos de dentro y fuera de la localidad.
- Un/a representante de cada una de las AMPAS.
- Un/a representante de cada Centro de Educación Primaria y Secundaria.
- Hasta dos representantes de entidades sin ánimo de lucro de la localidad
vinculadas a la infancia.
- Un representante de UNICEF Aragón en calidad de observador externo.
c) Secretaría: La secretaría del Consejo será desempeñada por el secretario/a del
Ayuntamiento, o por el empleado público en quien delegue. Actuará con voz y
Cada día a la hora prevista (¡má o menos¡) zarpará nuestro particular Titanic de la ciudad o “puerto”(de playa o montaña), que así lo solicite, y lo hará con la más estrafalaria tripulación que se pueda uno imaginar, dado que, en apariencia, tanto los oficiales al mando de la nave como los pasajeros y personal contratado pasarán por ser lo que en realidad no son, y es que en este barco casi nada es lo que parece, el sobrecargo Melvin ama la música más que a la Marina Real, los músicos son grandes amigos de lo ajeno y no aman a Melvin (por decirlo de alguna manera), y Mss Lola la mas “bella y bestia” de las pasajeras muestra un sorprendente e inexplicable parecido con el cocinero del Titanic, que a su vez lo tiene, y mucho, con Melvin, todo esto no tendría importancia sino fuera por que Mss, Lola viaja con el Diamante Azul, y George, Charlie y Henry (Los músicos) quieren que dicho diamante viaje con ellos, pero... para siempre,vaya. Y para ello, entre concierto y concierto, ellos cuentan con un plan, o..., no.
